Más de alguno a escuchado hablar de los OKR y probablemente esté inquietos respecto de si deben cambiar sus KPI a OKR.
Les explico a continuación. Un KPI es un indicador usado por las organizaciones para medir y analizar el progreso de un objetivo determinado. Los KPI permiten que una organización pueda ir evaluando el desempeño y determinando si es necesario ajustar el rumbo cuando existan desviaciones.
Los KPI podrían atribuirse a los Srs. Kaplan y Norton, que desarrollaron la metodología del Balanced Scorecard a principios de los 90. También es posible encontrar el mismo concepto en otros marcos de referencia, como, por ejemplo, en el “Diamante de la Excelencia Organizacional” de Kovacevic y Reynoso, bajo la sigla 3M (medidas, metas y medios).
A modo de ejemplo, un KPI podría ser la tasa de retención de clientes, si lo que se busca como objetivo es fidelizar clientes, o podría ser la tasa de conversión, si lo que se quiere es que el tráfico en la página web se convierta en ventas.
¿Qué son los OKR – objectives and key results?
Es una metodología de gestión que asegura que la organización focalice sus esfuerzos en lo que realmente importa. Fue desarrollado en Intel por Andy Grove y John Doerr y posteriormente aplicado por éste en Google.
Según Doerr, un objetivo es una declaración concisa que describe una meta cualitativa diseñada para impulsar a la organización en una dirección deseada. Un objetivo bien definido es acotado en el tiempo y debería ser inspirador, es decir, capturar la imaginación de las personas. Un ejemplo de objetivo sería: Mejorar el servicio al cliente. Por su parte un resultado clave es una declaración cuantitativa que mide el logro de un objetivo. Para el objetivo mencionado anteriormente, un resultado clave sería: un 5% de aumento en el NPS de aquí al próximo trimestre.
En qué se parecen los KPI con los OKR. Ambos métodos están pensados para fijar metas, medir y mejorar el desempeño, producir alineamiento. En el fondo los dos sistemas están diseñados para establecer una estrategia, hacerle seguimiento, alinear a las áreas operacionales a dicha estrategia y hacer que las cosas pasen.
¿En qué se diferencian?
En que los OKR buscan conseguir un logro concreto en el corto plazo, típicamente en el trimestre. Por su parte, los KPI son más a largo plazo. De ahí que la mayoría de las empresas que usan los OKR son empresas de la industria tecnológica o startups, que, por su naturaleza, requieren cambios en el corto plazo. Por otra parte, los OKR están más asociados a la filosofía ágil, que muchas organizaciones han estado adoptando en el último tiempo.